una flor amarilla quedo en las manos de una hermosa chica

porque me miras así, ella dijo olisqueando los pétalos

mira lo que te han dicho en esta carta

es que ni las letras comprendo porque están superpuestas, un chico dijo al acercársele

ella siguió viendo hacia la inmensa flor color del sol

cada vez que pienso en ti mis labios se deleitan con

el hermoso sabor de tu caracola

y no lo dijo yo, dijo el chico sin camisa aleteando con el papel

en sus manos

ella se llevó una mano al borde donde la sombra ligera

de su mini falda refrescaba sus piernas

no puedo dejar de pensarte picante, caliente

como el saludo de nuestras lenguas, siguió leyendo el chico

ella cerro los ojos tocando suavemente la piel de su entrepierna