rico, sereno, salvaje y provocativo es el color de tus ojos

y yo cautivándome del brillo coqueto de tus labios niña hermosa

me saben a fresa a la pulpa cruda de dulce y la lujuria

finamente subí abriendo el pestillo de tus secretos

y tú, la flor abierta libre, derritiéndose por el toque de los pétalos

es perfume privado ante las escaleras traseras

el deleite, la cena, la obscenidad y mi demencia

el embrague perfecto ante el cerrojo y las velas

montándome entrelazando tus finos cabellos con mis ansias

al beso tímido, al fresco roció, al saboreo del amor

a las palabras sin ruido

a las bocas provocantes y jugosas

suaves, primaverales, calientes y tiernos son tus ojos

tus ojos impetuosos y exquisitos