un deseo entre nosotros dos y la invitación salvaje de tus labios mi chica erótica

abriéndolos como los pétalos delgados de una flor delicada y colorida

al éxtasis de palabras al oído, perdiéndome en la sensualidad de tus cejas

en el atractivo sublime de tus pestañas cosquillosas

un deseo entre nosotros, y tu aroma embriagador, que me calienta

que me hace desatar mi apetito voraz para comerte a besos

al silencio impetuoso de una caricia, al fervor de la lujuria

al picante de tus labios, el beso sin limites

al afrodisiaco de tu perfume natural

desafiante como los amantes, devorarte hasta la plenitud

hasta que el trabalenguas en cada roce de la piel

se enrede en estrofas rítmicas salvajes y atrevidas

hasta que tus labios se arquen sublimes, al calor de la primavera

al sueño cumplido, al candor de un amor

al placer y al suspiro