tranquilos como el medio día son tus labios mi niña hermosa

delgados, de un trazo preciso para un beso de amor

el hechizo perfumado que me invita a acariciarlos

a saborear el dulce, el suave picante provocativo de tu lujuria

 mi niña, mi erótica promesa, el equilibrio perfecto entre el deseo

y la admiración

tu figura esbelta de suspiros delicados la combinación

de lo tierno y la provocación excitante

tranquilos son tus ojos de la profundidad seductora

de la sensualidad de la brisa, del sonido pasional

de un susurro romántico

tranquilas son tus cejas que delinean de encanto y sofisticación

del atractivo aromático de tu carisma

tranquilo es el roce de tus manos a mis caricias

al toque sutil y palpitante de los amantes