dejé sobre la mesa mis cartas cuando vi tus labios de curvas provocativas y misteriosas

chica seductora, mi juego es claro como tus ojos salvajes y cautivadores

hagamos de los deseos un éxtasis

sin límites, al desenfreno de una mirada de amor

hagamos de la noche un discurso poético

una canción romántica, al rubor, a la danza insaciable de las bocas

al ritmo imprudente de los secretos, a los ardientes latidos

flotando, balaceándonos, comprobándonos como pétalos

crudos, al zumbido indecente de la compatibilidad

deje mi estrategia sobre la luz de la luna

sobre la luna que resalta la forma de tu silueta, suave

erótica, la sensualidad

el encanto de los muslos, piernas, lisas,

rellenas al tacto

deje la prudencia y he lanzado mis rimas

chica hipnótica y poderosa

eres mi privilegio, admiración y mi suspiro