empapado en la sed de amor observo tus labios deseos por un beso

el rubor desaparece de tu rostro y la suave brisa te acaricia la piel

orgullosa y elegante te cubres de la luz de los dioses

tu vestido deja ver lo que guardas en tu corazón

el fuego se enciende batiéndose como tu cabello

ardo en la llama derritiéndome poco a poco

el aroma a seducción invita a mis suspiros a cerrar los ojos

mi corazón duro se levanta al cielo como si fuera un tributo

mis ojos se detienen en tus sensuales piernas

un torrente corre por todo mi cuerpo

siento que me hundo en el precipicio de la obscenidad

levantando los brazos me sostengo en tus senos

y vuelo en sueños

tan caliente como un volcán a punto de estallar