carita tierna de mujer de lirios seductores

mi cuerpo arde acariciándote en los deseos

como labriego entierro mis dedos con la suavidad del algodón

en el interior de tus pensamientos

sacando del fondo de tu alma las sombras

que atrapan en un bosque de hermosas enredaderas 

de nieblas que llevan al placer insaciable

de un amor del corazón

la leche espesa se hace espuma limpiando

los poros tapados por la ausencia

nosotras voces se alzan como coros

a veces en silencio como nuestros sueños

que se arropan, se entrelazan, se desbordan

dibujando corazones en nuestras pieles

tatuándonos el uno con el otro

 como si quisiéramos ser una voz lenta, un poema

una canción o el lucero mas brillante en el cielo azul.